Una eternidad esperé este instante, y no lo dejaré deslizar en recuerdos quietos, ni en balas rasantes que matan. Come de mi, come de mi carne, entre caníbales, tómate el tiempo en desmenuzarme, entre caníbales. Entre caníbales, el dolor es veneno, nena, y no lo sentirás hasta el fin, mientras te muevas lento y jadees el nombre que mata. Come de mi, come de mi carne, entre caníbales, tómate el tiempo en desmenuzarme, entre caníbales. Una eternidad esperé este instante.