Refugiados sobre el divan, buscándonos, agitados por nuestras formas, buscándonos. Algo ocurrió, una extraña sensación, un presentimiento. Tuve que dejar de hacer el amor en el momento. Fui en busca de un abrigo, hacia frío, encendí un cigarrillo, tenía miedo y ahí lo ví, un misil en mi placard, en mi placard, un modelo para armar pero nunca para desarmar. Te miré tristemente, tristemente, no hay más tiempo que perder, sonreíste, estaba ahí, un misil en mi placard, en mi placard, un modelo para armar, pero nunca para desarmar. Aquí también, creías que estabas lejos, aquí tambien. Un misil en mi placard, un misil en mi placard, aquí también.